El robot social EBO ha comenzado a realizar sus primeras interacciones en los centros Geryvida y Cervantes, marcando un hito en el uso de la robótica para mejorar la experiencia de usuarios en entornos sociales y asistenciales. Durante estas primeras pruebas, EBO interactuó con los usuarios a través de conversaciones diseñadas para fomentar la comunicación, el entretenimiento y el aprendizaje. La respuesta no podría haber sido más positiva: la satisfacción de los participantes fue altísima, según los resultados de las encuestas realizadas tras las sesiones.

Estos primeros pasos representan el inicio de un ambicioso plan para ampliar las capacidades de EBO y extender su uso a nuevos contextos, explorando un futuro donde la tecnología y la empatía se unan para crear soluciones innovadoras.

Los responsables de Geryvida y Cervantes ven en EBO una oportunidad única para potenciar el bienestar de sus usuarios y, al mismo tiempo, posicionarse a la vanguardia de la inclusión tecnológica.

Con estos resultados prometedores, el equipo detrás de EBO ya trabaja en nuevas actualizaciones y funciones que permitirán llevar este proyecto aún más lejos, demostrando que el futuro de la interacción social puede ser tanto humano como robótico.